Una partida de póquer sirve de excusa a uno de los grandes nombres de la dramaturgia británica para poner en escena un juego de cartas y testosterona, una comedia de hombres que habla, entre otras cosas, de padres y de hijos.
Después de haber interpretado al John de Senyoreta Júlia en el Grec 2012, Julio Manrique vuelve a sumergirse en el mundo teatral del británico Patrick Marber. Lo hace dirigiendo una pieza que el autor escribió cuando todavía era un desconocido y que, en clave masculina, utiliza una partida de póquer para hablar de temas que van más allá del juego. Y es que, como dice uno de los personajes de la obra en el restaurante donde pasa todo (en Londres en el original, en Barcelona en esta puesta en escena) “no se juega a las cartas, se juega al hombre”.
Seis personajes con vida propia, de aquellos que sólo consigue crear la mejor escritura teatral, transitan por el comedor y la cocina del restaurante: un cocinero, dos camareros, el propietario del negocio, un hijo con problemas con el juego y su mentor en el póquer. Todos ellos participarán el acto final en una partida en el sótano del local. Y, entre whisky y cigarros, cada jugada hará emerger alguno de los muchos temas de que trata la obra y que van desde la amistad y la lealtad, a la verdad y la mentira, pasando por el éxito y el fracaso.
¿Cuál de los jugadores ha ganado la partida en realidad?
Duración: 2 horas