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Ángeles que arrastraron las alas por esquinas sombrías, por habitaciones por hora, consumiendo sus paraísos artificiales. Juegan con cartas marcadas su partida perdida de antemano. Acorralados por la violencia le quedan sólo unos pocos sueños por gastar. Personajes que más allá de las tapias de la cárcel o los límites de la periferia saben que la condena es su propia existencia. Un destino que no se puede esquivar, aunque sus corazones brujuleen tras el amor. Hasta de lo más sórdido surge la esperanza. Flores del basurero que crecen en la noche.
La Zaranda explora con esta obra en el territorio más hostil de lo cotidiano, desde la tradición picaresca, con su desolador humor, cruzando la lectura social en busca de un sentido de elevación, abre la puerta a lo poético dentro de lo sórdido, una ranura de luz en lo oscuro. Llegando hasta otros limites donde se conjuga realidad y ficción, existencia y escenario.
La obra con la que la compañía cumplirá 48 años por los escenarios a lo largo del mundo. Entendiendo siempre el Teatro como misterio, riesgo, y ofrenda a las voces silenciadas.
Texto: Eusebio Calonge
Dirección: Paco de La Zaranda
Intérpretes: Ingrid Magrinya, Natalia Martínez, Gaspar Campuzano, Francisco Sánchez y Enrique Bustos
Espacio escénico: Paco de La Zaranda
Vestuario: Encarnación Sancho
Iluminación: Peggy Bruzual
Ayudantía de dirección: Andrea Delicado
Reportaje fotográfico y cartel: Víctor Iglesias
Distribución: Carme Tierz
Con la colaboración de Teatro de Rojas y Teatre Romea
Es una producción de La Zaranda, Teatro Inestable de Ninguna Parte